Las altas temperaturas que afectan el mundo, no solo afectan a los humanos, también a tu mascota.
Al igual que los humanos, los perros pueden sufrir golpes de calor, quemaduras y deshidratación que pueden llevarlos a la muerte.
Sacar a pasear a nuestra mascota a cualquier hora del día no es bueno, ellos están más cerca del piso que nosotros y no tienen una ropa que les proteja, a pesar de tener pelo largo o duro.
Su cercanía con el piso hace que los perros sientan hasta cuatro grados más de calor que el humano, lo que afecta más su salud.
El mejor horario para sacar a las mascotas es antes de las 11:00 horas o después de las 18:30, cuando el Sol no calienta a plomo.
Además, perros que tienen el pelo largo no deben ser rasurados o rapados, pues esto los deja más expuestos al calor y a sufrir quemaduras.
Los perros controlan su temperatura a través del jadeo, con la lengua, y en razas “chatas” no pueden hacerlo o se les dificulta.
Es importante que, ante un golpe de calor, se lleve a la mascota, de inmediato, al veterinario, para que, a través de soluciones intravenosas y con mantas mojadas o húmedas, vaya regulando su temperatura gradualmente y no de golpe.
Un golpe de calor para un perrito es muy peligroso y desgraciadamente los dueños, por querer ayudar a sus mascotas, utilizan agua con hielo o inclusive el chorro de la manguera, corriendo el riesgo de causar una trombosis sanguínea en el animalito.
Los síntomas de un golpe de calor en un perro son: jadeo extremo, respiración agitada, imposibilidad de respirar, no tener coordinación y el desmayo.
¿Cómo protegerlos?
- Evita sacarlo a caminar o hacer ejercicio cuando el Sol pega a plomo
- Mantenlo hidratado con agua limpia y fresca, en cantidad suficiente para su raza
- No lo dejes encerrado en el auto
- Asegúrate de que tenga un lugar de sombra y fresco en su espacio
- Cuida sus cojinetes, pues éstos podrían quemarse
- Puedes darle uno o dos hielos saborizados con fruta natural o colocarlos en su agua