La pasta elaborada con konjac contiene 10 calorías por cada 100 gramos, menos que alimentos como el apio o el calabacín.
Comer sin engordar. Ese es el eterno deseo de muchos, y el konjac, un alimento poco conocido en España, lo está haciendo posible.
Procede de Asia y es un tubérculo que se utiliza para elaborar pastas y harinas con muy bajo contenido calórico. Pero ¿es oro todo lo que reluce?
Empecemos por el principio: el konjac está compuesto principalmente por agua (90%) y fibra vegetal (el 10% restante) hidratable, cuyo nombre es el glucomanano, que, según la revista científica Scielo, “tiene una capacidad excepcional para captar el agua, formando soluciones muy viscosas”.
Esta es la clave del superalimento: al aumentar su tamaño en el estómago produce una sensación prolongada de saciedad.
Además, se calcula que por cada 100 gramos de pasta de konjac se aportan menos de 10 calorías a nuestro organismo, frente a las 300 que supondría consumir esos 100 gramos de pasta normal.
El último de sus grandes beneficios se relaciona con el tránsito intestinal.
Este alimento provoca un aumento del volumen fecal que ayuda a la evacuación y evita el estreñimiento, promoviendo una adecuada eliminación de deshechos.
Peligros y precauciones en el consumo del konjac
1. Tomarlo con suficiente agua. Ya hemos hablado de la excepcional capacidad del konjac para hincharse, por ello, y para evitar atragantamientos, es importante acompañarlo de mucha agua. Se han dado casos de muerte por este motivo en Estados Unidos, donde se utiliza el glucomanano en gelatina para frutas.
2. No ingerirlo justo antes dormir. Otro de los grandes beneficios del konjac era su capacidad para ayudarnos con el estreñimiento, y es, precisamente esto lo que puede suponer a su vez un riesgo, pues al hincharse tanto, aumenta la motilidad intestinal y necesitaremos defecar en pocas horas… pero si nos pilla durmiendo, puede dar lugar a gases, dolor intestinal o diarrea.
3. Evitar su consumo si estamos tomando medicamentos. Al hincharse, el glucamano efectúa un arrastre rápido de restos en el tracto intestinal, impidiendo que el intestino delgado absorba los medicamentos. Por esta misma razón, se desaconseja a los pacientes con diabetes consumir este alimento.
4. Existe peligro de asfixia para las personas con problemas de deglución.
Cómo última advertencia para un consumo saludable del konjac, los expertos recomiendan no abusar del alimento y seguir las dosis recomendadas por los fabricantes. El konjac podría interferir en la absorción de nutrientes esenciales y provocar malestar estomacal.